23 marzo 2006

Empresa autónoma versus autómata

Llevo un tiempo en una pelea extraña y desilusionada.

El objetivo final es organizar una empresa. ¡En eso coincido con el cliente! Sin embargo diferimos en la forma de conseguir ese objetivo.

Mi idea es montar adecuados procedimientos de trabajo en procesos autónomos interrelacionados. Esta autonomía de procesos y de responsables basada en la responsabilidad de estos sobre aquellos, pienso que, es el camino necesario para montar una organización aceptable.

El problema es que el cliente entiende la organización como una automatización del trabajo de las personas bajo su responsabilidad. En un par de horas por la mañana pretende decidir todo lo decidible y organizar el trabajo a todos para el resto del día.
Esta estrategia no funciona y es poco probable que funcione en un futuro. De echo se trata de una empresa familiar que está preparando el relevo generacional. Relevo complejo cuando los hijos están acostumbrados a no poder decidir nada y no cuentan con la necesaria independencia para equivocarse de forma controlada.

Por mi parte. Es casi imposible llevar a cabo cambios con responsables que no están acostumbrados a correr riesgos y plantearse su trabajo de forma crítica. Generalmente los humanos tendemos a acomodarnos y en una empresa con una organización automatizada bajo el criterio y responsabilidad exclusiva del empresario esa tendencia, pasando por la desmotivación, se convierte en un peligroso vicio que condiciona sensiblemente el futuro de la empresa.

En otras palabras. Una organización no se puede permitir el liderazgo de una única persona demasiado ocupada como para atender convenientemente todas las responsabilidades y atribuciones que se arroga en un afán de control desmedido, y a la larga perjudicial para ella y para la organización. La organización se envenena de dependencia, desánimo y acomodo.

Ahora que alguien me explique como explicarle esto a mi cliente ;)

2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Busca la manera de empezar poco a poco. El todo o nada tiene el riesgo de ser nada.

Si consigues que un departamento empiece a funcionar a tu manera, y los resultados son buenos, podrás conseguir extenderlo a otros. Eso sí, elige muy bien el primero, el que más posibilidades tenga de prosperar.

En esta vida no estamos solos, y hay que llegar a acuerdos en casi todo. Aunque vaya en contra de tu ansiada libertad.

Y si ese hombre ha mantenido una empresa familiar en pie durante años, es normal que pretenda mantener lo que conoce. Hay que reconocerle el mérito que tiene, muchas empresas de su sector habrán cerrado en esos años.

¡Suerte!

23/3/06 12:24  
Blogger LibertaCom said...

Tal vez tengas razón en la prepotencia que adivinas en mi entrada... pero bueno, una de las principales funciones de un blog es desahogarse.
Sobre empezar por un departamento, es bastante difícil, todos están sujetos al mismo sistema de automatismo. De todas formas estoy tratando de apoyarme en una persona que acaba de empezar y no está maleada. Pero tiene tanto trabajo pendiente que me parece que va a tener poco tiempo para implantar nuevos procedimientos.

24/3/06 16:12  

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