04 diciembre 2005

Busca tu sitio

Recientemente he asimilado completamente algo que espero no olvidar.



El león es un animal fabuloso y con un merecido puesto de rey de la sabana. Su fuerza le hacen temible en su hábitat.



El oso polar, es el rey del suyo. Tienen un arsenal de astucia y cualidades impresionante para sobrevivir en un medio extremo.

Si hacemos un ejercicio de imaginación y cambiamos a ambos reyes de ecosistema. ¿Qué tenemos?: Pronto dos animales muertos.

El león, en caso de tener la resistencia para sobrevivir lo suficiente al frío polar, no tendrá ninguna oportunidad a la hora de localizar y cazar un presa. Tampoco sabrá evitar los riesgos de la inestable superficie del mar helado.

El oso será torturado por su fino olfato en la saturada sabana. Su piel le hará fatigarse y sufrir un terrible calor y el color de su pelo le hará imposible acercarse lo suficiente a las posibles presas.

Hace poco sufrí una entrevista para una oferta de formador en un Taller de Empleo. Lo cierto es que fue un error presentarme a la misma. Pero los ánimos a veces flaquean y pensé que un año de descanso compatibilizando el enseñar a usar Firefox a 10 alumnos y seguir programando, formándome y buscando clientes, era una buena idea. He de reconocer que hice el más desagradable ridículo. El alcalde en cuestión llegó con los candidatos elegidos y yo sufrí el bochorno de formar parte de un paripé hasta que me dí cuenta de que el siguiente candidato iba preseleccionado para la misma oferta que yo. En caso de haber sido elegido, el trabajo me habría generado mas problemas que ventajas, pero me cabrea que se junte tanta gente: dos representantes de la Delegación correspondiente y dos del promotor del Taller de Empleo. Que hagan el numerito, se gasten nuestra pasta de contribuyentes, jueguen a ser dioses del dedo y me hagan perder el tiempo. He aprendido la lección, no quiero saber nada más de esta gente.

También me ha servido para salir de mi pequeño bajón emprendedor. No hay vuelta atrás; tengo que tirar para adelante con mi idea empresarial.

El día siguiente aproveché el tiempo muerto del anterior. Fui a una entrevista para concertar una consultoría a una gran empresa de un sector concreto de mi provincia. El proyecto empezará sobre el 12 de este mes. Primero habrá que pasar un par de visitas de evaluación y luego arremangarse en temas de organización y optimización de procesos. Espero que todo marche bien y el proyecto viva lo suficiente como para que los resultados refuercen la viabilidad del mismo.

También me ha servido para reactivar un proyecto actual, que en sus fases finales, se encuentra bastante paralizado por indefiniciones varias.

Ahora he asimilado que, como "emprendedor", es importante encontrar tu hábitat ideal; fuera del mismo, te expones al ridículo y el fracaso. En términos empresariales se puede traducir en: localiza tu público objetivo y posicionate en su mercado. No disperses esfuerzos y recursos en mercados inadecuados que te quemen a ti y a tu idea de negocio.

Por si a alguien le sirve :)